martes, 20 de septiembre de 2011
lunes, 19 de septiembre de 2011
¿Donde dices que estaban los Sindicatos?
Posted: 19 septiembre, 2011 by ccooaragon in Sin categoríaCrisis galopante. Superposición de varias crisis; financiera, de materias primas, ecológica…. Colapso del sistema financiero. Contracción del mercado global de bienes y servicios. Crack de la construcción. Paro. No hay empleo para los más jóvenes. Y los despedidos de las empresas se consideran mayores para encontrar empleo. Incertidumbre para el futuro. Pobreza…. El Gobierno ZP, a por uvas, diagnosticando una crisis con proyección temporal muy corta, soñando con los brotes verdes de una pronta recuperación y dando bandazos hasta alinearse con los postulados neoliberales y cargando contra salarios, pensiones y derechos laborales. ¿Qué los ricos paguen más?…. no, coño, no se vayan a mosquear… No está nada mal, para tratarse de un gobierno socialista.
La oposición conservadora del PP, y la de los nacionalistas de derechas, que por nacionalistas no son menos de derechas, subidos al carro de la demagogia y sosteniendo que la dosis de veneno para acabar con la situación (¿con los más desfavorecidos?) no era la suficiente. Los empresarios procurando sacar tajada empujando reformas laborales, bloqueando los convenios, negándose a un ejercicio de responsabilidad con acuerdos globales equilibrados… y jugando a la política para acelerar un cambio de ciclo que (piensan ellos) les resultara (todavía) más favorable..
Recordemos. El gobierno legisla y tiene la responsabilidad de las políticas económicas. La oposición, además de oponerse, tiene el voto de una buena parte de la ciudadanía para dar alternativas y contribuir al bien común. Los empresarios, como su propio nombre indica, son los que emprenden proyectos, deben hacerlos modernos (reinvirtiendo parte de los beneficios o ampliando capital) viables, competitivos con precios razonables, crear empleo (a una mala mantenerlo) y entender que alguna responsabilidad tienen que ejercer con sus trabajadores..
Y como prueba de la racionalidad que sustenta todo esto, a los que se les mete caña de una forma descarnada es……¡¡¡a los sindicatos!!!. En tormenta, lluvia fina o gota a gota, no deja de destilarse una mala baba acongojante contra CCOO y UGT..
Porque, además de atender los crecientes problemas de los trabajadores en las empresas y en las sedes, de elaborar propuestas, proponer diálogo social, dinamizar las mesas de negociación, dar salida a los convenios, defender el empleo en las empresas, manifestar y demostrar capacidad de compromiso y acuerdo… además de pringarse hasta las cejas en un ejercicio de responsabilidad que en este país, que ya nos gustaría ver en otros… Además de eso… ¿que coño han estado haciendo los SINDICATOS?..
Compañero, compañera. Ciudadano, ciudadana. ¡Los Sindicatos no han dejado de luchar!. Cada día. Y además manifiestan una seria voluntad de seguir haciéndolo. Seguirán las agresiones al movimiento sindical, claro. Y la manipulación de nuestro pasado más inmediato, queriendo provocar amnesia o trastocando la realidad de lo sucedido. Y hasta es posible que algún que otro “progre” o recién sumado al proceso de movilización social, les hagan el juego (gracias por venir nos decía algún desustanciao en las manifestaciones en contra de la reforma de la Constitución). Hagamos un esfuerzo y no lo permitamos.
CCOO de Madrid ha editado un vídeo muy útil para refrescarla memoria. Difúndelo, dalo a conocer entre tus compañeros, en las redes sociales, cuélgalo en tu blog, web, facebook, Twitter. Actívate, sé activista y contribuye a que la mentira y/o el olvido no se instale en la sociedad.
lunes, 12 de septiembre de 2011
CCOO PV insta a ayuntamientos y administraciones a sumarse a la Semana Europea de la Movilidad
09-09-2011. El sindicato se dirigirá por carta a los municipios valencianos para que colaboren en la celebración de esta semana, desde el próximo día 16 hasta el 22, e impulsen medidas para conseguir ciudades más transitables de forma permanente.
El sindicato apuesta por un modelo de transporte sostenible.
Uno de los objetivos de CCOO PV es contribuir a lograr una movilidad sostenible y segura. El derecho a un transporte sostenible y no excluyente es una de sus exigencias permanentes, ya que supone un gran beneficio para el conjunto de la sociedad.
Ahora, en un momento de crisis socioeconómica y ambiental global, apostar por un modelo de movilidad más respetuoso con el medio ambiente (tanto de personas como de mercancías) contribuye a mejorar la calidad de vida de la ciudadanía, así como a potenciar la competitividad de las empresas y la economía del país.
La utilización a gran escala del automóvil privado y del camión en detrimento de sistemas de transporte más sostenible, ha comportado una pérdida del bienestar colectivo y una fuente de impactos ambientales (emisiones locales y globales, ruido), sociales (accidentalidad y exclusión) y económicos (pérdida de competitividad y costes) para toda la ciudadanía.
Cambiar esa tendencia es labor de todos, pero el impulso debe venir de la mano de las administraciones y en mayor medida de los ayuntamientos: con una apuesta por un diseño de ciudad que favorezca el uso del transporte público, de la bicicleta y de desplazamientos a pie; realizar una labor de sensibilización e información sobre la necesidad de hacer un uso eficiente del vehículo privado con la participación de todos los agentes implicados.
Por ello, CCOO PV insta a que las administraciones se sumen a la conmemoración de la Semana Europea de la Movilidad, impulsando propuestas y actuaciones permanentes encaminadas a conseguir una ciudad más transitable y sostenible. Igualmente, hace un llamamiento a que el día 22, se convierta realmente en el ‘Día sin coches’, sin subterfugios y sin cambios al domingo como ya ha ocurrido en otras ediciones.
jueves, 8 de septiembre de 2011
Buenas tardes:
l@s delegad@s de prevención queremos poner de manifiesto nuestra total disconformidad y repulsa en la forma de actuar de los miembros del departamento de OHS que, a sabiendas (desde hace más de un mes en el borrador del acta nº 7 viene reflejado, además de en la convocatoria mandada el pasado martes) que hay convocada una reunión previa para tratar los comunicados de riesgo, hacen caso omiso y no se presenta ninguno de sus componentes dejando claro lo que le importa la salud de los trabajadores ni la resolución de los comunicados de riesgo. (Flaco favor en el fomento de la implementación de los comunicados ya que si el departamento no ni hace caso, como lo van ha hacer los trabajadores)
L@s delegad@s de prevención, representantes de los trabajadores si hemos estado a la hora convenida y en el lugar acordado.
Con el responsable de infraestructuras, aunque tarde, si hemos podido hablar sobre algunos comunicados de más relieve además de los que se han solucionado durante el mes de agosto.
Además, seguimos recordando que la acta nº 7 (18 de julio de 2011) sigue sin firmarse.
jueves 8 de septiembre de 2011
SOBRE EL PACTO PSOE - PP
Pero, ¿cuál es el problema a que nos enfrentamos? ¿La deuda a los bancos o la crisis económica general? Deuda de los Estados con los bancos ha habido siempre; los bancos han hecho siempre grandes negocios prestando dinero a los Estados. Pero la crisis financiera no ha sido provocada por las deudas estatales, sino por una política bancaria enloquecida que ha multiplicado los préstamos sin garantías a personas y entidades privadas, lo que ha obligado a los Estados a subvencionar a los bancos con mucho dinero para evitar consecuencias que su quiebra podía suponer para millones de familias que habían depositado en ellos sus ahorros. Hay que diferenciar la crisis financiera provocada por la ineptitud y la corrupción de sus ejecutivos
de Ia crisis económica general que ellos han esencadenado. La dificultad está en que el sector financiero se ha convertido en un poder fáctico tan poderoso que impone sus decisiones a los poderes políticos y logra que éstos den prioridad a la solución de la crisis financiera sobre la solución de la crisis económica general. Y la práctica ha demostrado que ese enfoque no resuelve la crisis de los bancos, pero ahonda y agrava la crisis económica general, que amenaza con hacerse crónica.
Las pruebas de esto abundan. Primero se hizo el rescate de Grecia, que no resolvió nada. Grecia se ve condenada a un segundo rescate que jamás podrá pagar ni vendiendo la Acrópolis y trozos de sus riquezas históricas y del territorio nacional. Después hubo que rescatar a Irlanda y Portugal. Y la situación se tornó crítica para España e Italia con peligro de ser, a su vez, rescatadas. Y empezaron a ser afectadas las economías de otros países considerados ricos. Hasta la deuda de la economía más poderosa del mundo, los EE UU, se vio afectada. Además, en los EE UU, Alemania y Francia, en los que se consideraba superada la crisis, la recesión amenaza de nuevo, lo que supone una seria agravación de la crisis económica general. Todo ello porque los políticos y los Gobiernos no han sido capaces de coger el toro por los cuernos y afrontar claramente el problema esencial: la reforma global del sistema financiero, que se ha convertido en el obstáculo a la solución racional de la crisis. Esta situación es aprovechada por la extrema derecha social y política para intentar anular los progresos hechos por los pueblos desarrollados en un siglo a fuerza de lucha y sacrificio. Y aquí se inscriben también los peligros potenciales del pacto del PSOE y el PP, que es una concesión más al poder de los mercados.
La perspectiva política que ofrecen todas las encuestas da por hecho que tras noviembre tendremos un Gobierno del PP, el partido que defiende los intereses de la banca. Un partido que ha defendido siempre una política fiscal que privilegia a los poderosos. En las condiciones de crisis esa política puede crear una situación en la que la recaudación del Estado sea insuficiente para garantizar los servicios sociales propios del Estado del Bienestar y con la Constitución en la mano podría ir desmontando lo que tanto ha costado a nuestro pueblo alcanzar. Entonces comprobaríamos lo grave de la ocurrencia del actual jefe del Gobierno que, por cierto, no ha “tranquilizado” en absoluto a los mercados. l
lunes, 29 de agosto de 2011
Pedregada constitucional y lluvia ácida laboral.
Posted: 2 septiembre, 2011 by ccooaragon in Sin categoríaEl techo constitucional al déficit se está convirtiendo en una tormenta de verano, pero de las que dejan profunda huella.
En una temporada de grave sequía, los que la han desencadenado la tronada (PP-PSOE) nos quieren convencer de que esta nos van a saciar la sed y va a reverdecer nuestra agostada economía. No nos dicen que no es lluvia regeneradora lo que nos traen, sino una enorme pedregada que pretende arrasar con el ya exiguo estado de bienestar, que el esfuerzo de varias generaciones ha ido construyendo en nuestro país.
La chapuza del acuerdo, su contenido, su oportunidad y el déficit democrático que señala, no la entiende ni dios. Es más que posible que no sea entendida ni por la mayoría de sus señorías que hoy la aprueban, con escasísimas rebeldías a las disciplinas impuestas por los aparatos.
Sabido es que el problema de España no es la deuda pública, soportamos una de las más escasa en nuestro entorno europeo. Lo realmente grave es la tremenda deuda inducida los pasados años por el sistema financiero en el sector privado; empresas y familias.
Más que sabido es que ya hay instrumentos legales que ponen límite al déficit en la elaboración anual de los presupuestos del estado. Por otra parte el Tratado de Maastrich ya señala un techo del 3% al déficit en situaciones normalizadas.
La reforma no es sino un nuevo “gesto” a los “mercados”.
Gesto inútil que no les va a saciar, porque la dinámica depredadora en lo inmediato no entiende de medios plazos.
Gesto irresponsable porque pone en serio riesgo, no solo el futuro de los servicios públicos y la viabilidad de algunas administraciones, sino el necesario estímulo a la economía privada en tiempos de crisis y por tanto a miles de pequeñas empresas y autónomos.
Gesto antidemocrático porque se hace al final de una legislatura agotada políticamente hace meses, con unos diputados elegidos bajo unos programas electorales que no contemplaban una medida de tanto calado político.
Gesto de sumisión a decisiones tomadas por estadistas de otros países.
Gesto incalificable de cesión de soberanía nacional, no en un proceso democrático de construcción política de Europa, sino al dictado de aquellos que están diseñando una salida a la crisis que deje un mundo más dual, con más fracturas sociales, más injusto, con unos pocos muchísimo más ricos, y con unos muchos terriblemente pobres.
Todo esto es grave. Y por añadidura, lo aparatoso de la tronada, hace que quede en segundo plano la lluvia ácida, que no cesa, de la reforma de nuestro mercado laboral; ahora con contratos de aprendizaje hasta los 30 años y con la supresión a los límites temporales a los contratos precarios. (Leer artículo de Pablo Castillo)
Y en noviembre votamos….¿que cabriolas tendrán que hacer algunos para seguir sosteniendo que son progresistas, de izquierdas y que sus propuestas van dirigidas al bienestar social?. Si no fuera por lo dramático de la situación, podría ser incluso divertido.
domingo, 28 de agosto de 2011
¿Qué pasa en la economía española?
Lo que está ocurriendo en la economía española es fácil de entender. La economía no está creciendo y ello se debe a que la población ha dejado de comprar bienes y servicios como solía hacer antes y ello como consecuencia de que está profundamente endeudada. Las empresas también han disminuido su producción de bienes y servicios porque la demanda por tales bienes y servicios ha bajado, resultado de la disminución de la capacidad adquisitiva de la población y consecuente endeudamiento.
Paralelamente, el Estado está recortando el gasto público a fin de reducir el déficit público que erróneamente se considera la causa del escaso crecimiento económico. El dogma neoliberal al cual los establishments económicos, políticos y mediáticos se adhieren, postula equivocadamente que la causa de que la economía no crezca se debe al elevado déficit público.
Economistas neoliberales como Sala i Martín continúan machaconamente insistiendo en que el problema mayor que tiene España es lo que consideran excesivo endeudamiento público (“Crisis: liderazgo político”, La Vanguardia, 17/08/11), cuando en realidad, la deuda pública está por debajo de la media de la Eurozona. Es más, tal argumento que atribuye el problema del estancamiento de la economía al endeudamiento se olvida de preguntar ¿por qué la gente y el Estado están endeudados? Si se hicieran la pregunta y miraran los datos, verían que la capacidad adquisitiva de la población (la demanda doméstica) se ha ido reduciendo, y los ingresos al Estado han ido disminuyendo, en parte como resultado de la reducción de impuestos. Tales autores neoliberales parecen desconocer porqué los ingresos al Estado se redujeron y porqué la gente tiene que endeudarse.
Es interesante también ver el error o la falsedad del argumento que se utiliza para sostener la tesis de que la disminución del déficit y de la deuda facilitará a España a salir de la recesión. Se nos dice que el consumo de recursos por el sector público crea una escasez de fondos en el sector privado. Pero el problema que tiene el mundo empresarial es que el sector privado está estancado por la falta de demanda. De ahí la enorme importancia de estimular la economía mediante el gasto y el empleo público.
El paro empeora el problema de la demanda
No es pues de extrañar que la economía no crezca y que la tasa de participación de la población adulta en el mercado de trabajo continúe bajando, pues el número de puestos de trabajo que se están creando está descendiendo y el de puestos de trabajo que se están destruyendo está aumentando, con lo cual el número de personas en paro ha alcanzado unas cifras claramente alarmantes que determinan un enorme sufrimiento humano. Carles Muntaner i Joan Benach, dos investigadores de gran credibilidad y prestigio científico, el primero de la Universidad de Toronto y el segundo de la Universitat Pompeu Fabra, han documentado el enorme coste humanos que significa estas tasas de paro no solo entre la población desempleada sino también entre la población empleada creando una enorme inseguridad entre toda la población.
Pero además de ser un enorme problema humano y social, el elevado desempleo y baja tasa de ocupación en la población es un grandísimo problema económico. Contribuye a la disminución de la demanda y por lo tanto al estancamiento económico.
Frente a esta situación lo que el Estado debería hacer es estimular tal demanda y crear empleo. Ni los ciudadanos ni las empresas pueden ahora estimular la economía: lo tiene que hacer el Estado. Esto es lo que ha ocurrido siempre cuando un país ha estado en una recesión tan profunda como la actual, pareciéndose más a una depresión que a una recesión. Ocurrió así durante a la Gran Depresión de principios de siglo XX y durante el periodo post II Guerra Mundial en Europa. En ambos casos, los países salieron de la recesión a base de estimular la economía mediante el aumento del gasto público y la creación de empleo. En realidad, esta experiencia histórica demuestra que es impensable que se salga de una elevada recesión sin un enorme estímulo económico que el Estado tiene que liderar con un gran aumento del gasto público a fin de crear empleo.
El argumento en contra de tal alternativa, frecuentemente utilizado por autores neoliberales y conservadores, es que el Estado no tiene recursos, lo cual es fácilmente demostrable que no es cierto. Los Estados tienen recursos, lo que ocurre es que no los recogen.
España es un ejemplo de ello. El nivel de riqueza del país permitiría un mayor gasto público para estimular la economía y crear empleo. Pero no lo hacen. De ahí que sean los Estados de la periferia del euro (Grecia, Portugal, Irlanda y España) los que están en el centro de la Gran Recesión, con elevadas tasas de desempleo. Sus Estados tienen unos ingresos muy bajos resultado de unas políticas fiscales muy regresivas en los que la gente con más recursos y las rentas del capital no están contribuyendo como deberían (ver mi artículo en Le Monde Diplomatique, “No hay fatalidad, existen alternativas”, Agosto 2011, www.vnavarro.org). Y ahí está el problema. La situación en España es vergonzosa. Las grandes empresas pagan menos impuestos que las medianas y pequeñas empresas, y las rentas superiores gravan menos que las rentas medias y bajas. Según el informe del colectivo de técnicos del Ministerio de Hacienda, GESTHA, el tipo efectivo del Impuesto de Sociedades de las empresas que facturan más de 180 millones de euros es 19,5%, cuatro puntos menos que el tipo efectivo de las empresas que facturan hasta 60.000 euros (23,9%). Un tanto semejante ocurre en el IRPF. A mayor renta, menor es el tipo efectivo. En total, la evasión fiscal de las grandes fortunas, corporaciones empresariales y grandes empresas fue de 42.711 millones de euros en 2010, lo cual representa el 71,8% de toda la evasión fiscal. Estos datos muestran que no es que no existan recursos. Lo que ocurre es que el Estado no los recoge.
Otro argumento que también se utiliza, incluso desde sectores de las izquierdas, en contra de que se aumente el gasto público es que, aceptando que esto es necesario, creen que ello no puede hacerse en solo un país. Inmediatamente sacan del bolsillo argumentativo el caso del gobierno Mitterrand indicando que tal gobierno se vio forzado a renunciar a las políticas expansivas prometidas en su programa, pues estimulaba el consumo de productos importados pero no los exportados, empeorando la balanza de pagos. Pero muchos autores han mostrado que el problema de Mitterrand fue que se opuso al cambio del valor del franco, queriendo mantener el franco fuerte, con lo cual se perdió la oportunidad de incrementar sus exportaciones a costa de sus importaciones. En realidad España podría seguir unas políticas expansivas distintas a las de austeridad, si realizara la reforma fiscal que corrigiera su gran regresividad. El hecho de que esto no se haga se debe al excesivo poder que tienen los grupos con mayores medios, y su abusiva influencia sobre las instituciones mediáticas y políticas del país.